Biosabor hacia una alimentación sin desperdicio

Para que puedas saber un poco más de un tema tan importante y que nos afecta a todos, te vamos a contar como lo hacemos en Biosabor, ya que hemos sido seleccionados por AECOC, dentro de su iniciativa «Alimentación sin desperdicio« como un caso de éxito con desperdicio cero.

 

Desde la creación de Biosabor en 2008, se ha conseguido cultivar 300 hectáreas que producen 30.000 toneladas al año de hortalizas ecológicas. A lo largo de los ciclos de cultivo, se generan residuos en varios puntos de la cadena donde será de gran importancia una buena gestión de los mismos para no acabar tirándolos innecesariamente con el gran impacto económico y medioambiental que esto conlleva.

 

Durante el proceso de producción, estas 300 hectáreas generan anualmente 12.000 toneladas de residuo vegetal. Dicho residuo, principalmente compuesto por restos de final de cultivo, destalle y deshoje, se lleva a una planta de compostaje cercana a nuestras instalaciones y una vez allá se transforma en humus de lombriz. Este fertilizante ecológico supone el 30% de la necesidad vegetal del suelo, que después será utilizado para la siembra de nuestros productos.

 

Una vez terminado y recolectado el producto, las 30.000 toneladas de producto fresco se llevan a las instalaciones donde saldrá de la siguiente manera:

  • 85% venta fresco
  • 7% transformados y V gama
  • 5% venta a industria
  • 3% donación comedores sociales
  • 5% donación consumo animal

Este caso lo expusimos dentro de las V Jornadas contra el desperdicio alimentario organizado por AECOC en Madrid el pasado 28 de septiembre y aprovechando la oportunidad de estar ante un público internacional quisimos hacer hincapié en la parte correspondiente a V Gama la cual enfocamos directamente al I+D, Nutrición y Salud. En el departamento que desde 2015 dedicamos a este tema, la V gama es el vehículo que utilizamos para acercar la salud a nuestros consumidores.

Esta consta de una amplia gama de gazpachos, salmorejo y zumos a base de tomate ecológico adaptados para cada persona y condición. La consideramos alimentación funcional, pero desde un punto de vista más natural que mejore la calidad nutricional a base de ingredientes ricos nutricionalmente y no aditivos sintéticos, como estamos acostumbrados a ver en las etiquetas y listados de ingredientes de productos comerciales.

También realizamos diferentes actividades de investigación en nutrición, desarrollo de productos y en definitiva una integración necesaria con el sistema sanitario que hasta recientemente no contemplaba al sector agrícola como una parte necesaria.


Nuestro modelo de innovación apuesta por la fusión del sector agroalimentario con el sector sanitario